#Colombia Santos tiene prisa, necesita salirse con la suya antes que Obama termine su mandato. Que le haya llevado al gobierno seis años de negociaciones para firmar el acuerdo con los terroristas de las FARC al que los colombianos le dijeron “NO” y se haya tomado apenas seis semanas para enmendarlo, pone a prueba su credibilidad. Esto explica por qué parece ahora que ha abandonado su promesa de que el acuerdo tendría que ser aprobado por una consulta popular en un proceso de votación justo.
Sr. Presidente, andan diciendo que usted está muy afanado para poderse llevar el acuerdo listo a la hora de recibir el Nobel y hablar con el Papa. Ojalá se lograra. Pero si el diálogo avanza bien, no vuelva a cometer el mismo error de forzar acuerdos finales a la carrera que arriesgan todo lo logrado. Me parece justo tambien contarle que la gente de la Costa está indignada con la indolencia de Electricaribe y con usted por la ineficacia de los siete ministros de Minas y Energía que ha tenido en los seis años de su gobierno.
En un resultado sorpresivo, con el 99,25% de las mesas escrutadas, el 50,24% de los colombianos (6.408.350 Votos) se manifestaron por el “No” en el plebiscito de este domingo para ratificar o no el acuerdo por la paz con las FARC y el 49,75% lo hicieron por el SI (6.346.055 Votos). Colombia le dijo NO a la paz de Santos con los terroristas.
El prestigioso analista Fernando Londoño Hoyos explica que el presidente Santos ha amenazado a todos los Colombianos “o me aprueban el referéndum o se viene la guerra urbana”. Una amenaza que busca infundir el miedo en la población, que busca chantajearla para que apoyen sus planes de impunidad para los terroristas de las FARC y el ELN, garantizando así su elegibilidad para convertirlos en congresistas, y continuar juzgando a los miembros de las FFAA que han arriesgado su vida para proteger al país de la violencia.
El Departamento de Estado de los Estados Unidos ha confirmado en los últimos días, que las FARC y el ELN serían los mayores grupos terroristas en el hemisferio occidental. Así lo dio a conocer, a través de un informe anual en el cual analizan las acciones terroristas cometidas por los principales grupos criminales del planeta.
#Colombia La prestigiosa periodista española Salud Hernández Mora, se encontraba cubriendo un reportaje en el Catatumbo, cuando fue salvajemente secuestrada en El Tarra, Norte de Santander, una zona con fuerte presencia de terroristas FARC y ELN.
#Colombia En una carta enviada por el Dr. Alejando Ordoñez Maldonado, Procurador General de la Nación, al presidente Juan Manuel Santos, puede verse el notable desagrado con el que recibió el anuncio de que el grupo terrorista de las FARC y la presidencia acordaron que el “tratado de paz” que firmen sea integrado a la Constitución Nacional de Colombia y que incluso quede por encima de ella.
“[El actuerdo entre los terroristas de las FARC y el gobierno Santos] es un acuerdo de impunidad. Sí es posible tener acuerdos de paz con justicia. No estamos llamando a incendiar el país; es un movimiento pacífico, no violento. La resistencia civil incluye marchas, manifestaciones, apoyo al no en el plebiscito, apoyo a iniciativa de revocatoria presidencial, así aún no esté contemplada en la Constitución”, afirmó Uribe.
Parecería suficiente desventura que Juanpa y sus amigotes hubieran desaparecido el producto de la bonanza petrolera, la mayor que Colombia tuvo en su historia. Si para simplificar recordamos que en los cinco primeros años de este gobierno el país producía más de un millón de barriles por día y que cada uno de esos barriles tuvo precio de más de cien dólares, nos resulta muy fácil la cuenta: Colombia recibió más de treinta y seis mil millones de dólares por año, de los cuales al Estado le quedaban, libres de polvo y paja, más de veinte mil millones de dólares. Nunca antes tuvimos tanto y nunca antes botamos, despilfarramos y dejamos robar tanto.
Bajo un fuerte aguacero, decenas de miles de colombianos se unieron hoy a la marcha “NO+” en Bogotá Colombia, expresando su descontento con la paz sin justicia y contra la persecución de militares, policías y políticos opositores que lleva adelante el Presidente Juan Manuel Santos. La misma marcha se repitió de manera exitosa en las principales ciudades del país y frente a las embajadas colombianas en distintas capitales del mundo en un total de 23 marchas.