Los escraches a funcionarios públicos del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner parecen haberse multiplicado en Argentina. Esta vez le tocó el turno a Carlos Zannini, ex secretario legal y técnico de la presidencia durante doce años. La percepción de la ciudadanía sobre los niveles de corrupción y descaro del gobierno pasado parece estar empeorando entre gente que no confía en el sistema judicial y no ve a la impunidad como una opción.
Durante las últimas jornadas, el sindicato de taxistas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se ha mostrado más que nervioso. Sus jerarcas saben que estamos en vísperas de una revolución en el área del transporte público que ofrecerá al usuario una nueva opción a las ya conocidas. La discusión de fondo no es el sí o no a Uber. Es si las personas son libres de contratar el servicio que deseen o si se impone una corporación que, ante la competencia, se comporta de forma mafiosa.
“Macri me impresionó favorablemente. Tuvimos una conversación excelente”, afirmó en la conferencia de prensa que dieron conjuntamente ambos mandatarios en el Salón Blanco de la Casa Rosada y elogió que el primer mandatario “se ha movido rápidamente en reformas para crear un crecimiento económico, y ha logrado en poco tiempo” resultados positivos para el país.
Cuando uno revisa los elementos que determinan la dinámica del desempleo en Argentina, debería resultar más que claro que la única responsabilidad del gobierno de Mauricio Macri en este proceso es haberle quitado la careta que ocultaba la malformación facial de la economía kirchnerista.
Si bien hoy en día es políticamente incorrecto hablar de la jubilación privada en Argentina, tengo bien en claro que la mayor estafa que el populismo le ha hecho a la gente es la jubilación estatal. En nombre de la solidaridad social, el sistema de reparto ha sometido a generaciones de trabajadores a que terminen sus días de jubilados como verdaderos mendigos.
A poco más de una semana de aterrizar en Buenos Aires, en la primera visita de un presidente de Estados Unidos a la Argentina en casi 20 años, Barack Obama dijo que las políticas de la ex jefa de Estado Cristina Kirchner eran “siempre antiestadounidenses”, con una “retórica que data de los años ’60 y ’70”, y que la administración de Mauricio Macri, en cambio, reconoce que hay “una nueva era” y busca “transparencia, competitividad y progreso”.
#Argentina Incendio en Canal 13 y TN ¿Intencional? ¿Casualidad? Muy raro…
Aquellos que atacan a la ley de derribo argumentando que es una declaración de pena de muerte, se terminan colocando en una posición de complicidad con un negocio multimillonario que consume miles de vidas por semana, no sólo en Latinoamérica sino alrededor del mundo. Mientras tanto, buena parte de dichos fondos se dedican a financiar a los regímenes del Socialismo del Siglo XXI. Es tiempo de actuar.
#Argentina ¿Qué es lo mínimo que hay que hacer’? – por Roberto Cachanosky
#Argentina Hay que bajar el gasto público – por Gabriel Zanotti