Recién se publicó el documento “El perfil de la población de origen guatemalteco en Estados Unidos”, elaborado por Cemla, BID y Fomin. Por la importancia que el migrante guatemalteco tiene para la economía nacional y el triste hecho de que este aporte sigue sin ser reconocido en su justa dimensión por políticos, empresarios, académicos y el resto de la sociedad civil guatemalteca, comparto algunos detalles del estudio, a ver si así comienzan a prestarle atención y apoyo a los migrantes chapines.

Ciudad de Guatemala – En el 2013, Guatemala recibió US$5 mil 105 millones por remesas familiares. Esto equivale a 9.5 por ciento del PIB guatemalteco. Las remesas familiares provienen casi en su totalidad de EE. UU.

En EE. UU., para el año 2012, habían 858 mil 530 personas de origen guatemalteco, siendo la décima población migrante en ese país más numerosa y los cuartos a escala de América Latina —después de México, El Salvador y República Dominicana—.

En 1990 había 225 mil 739 migrantes de origen guatemalteco, y para el 2012, 858 mil 530 personas. Más de la mitad de los migrantes guatemaltecos han llegado a EE. UU. luego del año 2000. Estos datos parecen confirmar mi teoría, que he expresado anteriormente: buena parte de la migración guatemalteca hacia EE. UU. ha sido por razones económicas y se incrementó el flujo luego de la crisis del café en 1998, cuando las personas que cortaban café estacionalmente se encontraron sin empleo y comenzaron a buscar alternativas, puesto que la migración para trabajar era parte de su estilo de vida.

También estos datos de migración son una clara muestra de que el sistema de exoneraciones fiscales en Guatemala para incentivar sectores productivos de los cuates no sirve para generar empleo, porque esos incentivos se establecieron en 1989. En vez de reducirse la migración hacia EE. UU., ha crecido en casi cuatro veces de 1990 al 2012. ¿Saben qué pasa? El sistema mercantilista de privilegios fiscales no funciona y no ha generado empleo ni oportunidades para la población guatemalteca en el país. Para mas “inri” de los que han controlado los incentivos fiscales y sus eternas promesas de generar empleo —llevan una década controlando el tema de competitividad y el mismo discurso—, del período 2007 al 2012 el número de inmigrantes guatemaltecos hacia EE. UU. creció un 22.6% —158 mil personas—, mucho más que el porcentaje que otros grupos migrantes en el mismo período.

Más del 87% de los inmigrantes chapines se encuentran en edad de trabajar —18 a 65 años— y la mayoría son hombres. Más de un tercio de los chapines están en California.

La mayoría de los migrantes guatemaltecos trabajan en construcción, manufacturas, restaurantes y recreación y hospedaje.

En el 2012, de la población de origen guatemalteco, un 70% eran inmigrantes y el resto eran nacidos en EE. UU. de origen guatemalteco. Esto puede significar que el flujo de remesas se mantendrá estable en los próximos años.

Fuente: Centro de Estudios Económico – Sociales (Guatemala)