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Bolivia

Bolivia: El ojo de la tormenta – por Gonzalo Arellano Duran

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51187Desde hace mucho tiempo atrás, Bolivia viene atravesando una crisis estructural, político – social, que nos esta llevando a la deriva como país y sociedad. Todos creemos que lo que hacemos es lo correcto y muchas veces con el pretexto de pretender el cambio, ser mas eficaces y eficientes y no mirar nuestros errores, “dando vuelta la página”, nos olvidamos ese refrán importantísimo que nos dice “pueblo que olvida su pasado, paga con los mismos errores en un futuro” (Ojo que hay que saber que son errores y que son resentimientos absurdos)…

Vivimos en una sociedad donde el que grita más fuerte es el que tiene la razón, o donde el que por azares del destino tiene un apellido nacional, bajo su consigna tediosa de 500 años de opresión, puede “dar vuelta la tortilla” y constituirse en el opresor de las nuevas generaciones, algo que a mi humilde criterio me parece un absurdo…. Que culpa tengo yo como ciudadano de las cosas que se hayan cometido hace 500 años, ¿acaso yo tuve la oportunidad de vivir y actuar en esa época? Al menos bajo cierto criterio lógico creo que no y que ningún humano que vive en nuestra sociedad tampoco (caso contrario Matusalén que era el hombre que vivió más años se quedo como piojo tuerto…)…

Llego a pensar que por desgracia, (y uso esa palabra debido a que no encuentro otro calificativo para mencionar lo que sucede..) me toco vivir en la peor etapa de lo que al parecer y es y será la destrucción del lugar donde nací… Al menos hace aproximadamente quince años o más y hasta el año pasado, yo recuerdo que era un ciudadano Boliviano, que vivía bajo un país con una bandera y un himno que nos identificaba, con tres poderes del estado, bajo un sistema que si bien fue importado, fue el sustento real de la estabilidad nacional por 183 años de vida republicana desde 1825 al 2008, la verdad que no cuento el 2009 porque la verdad no se ni que sistema es el que se aplica hoy en día, donde me entero que al igual que en Venezuela ya no tengo tres poderes, sino cuatro, donde la rojo, amarillo y verde que amo y que me identifica, a sido cambiada o menospreciada por una bandera de colores peculiares que simplemente representa a la comunidad aymará (que sin embargo y según estudios recientes era una bandera de guerra española del tiempo colonial que llego America por causas obvias y que los lugareños la tomaron como símbolo por desconocimiento de que era y que desde 1992 o tal vez un poco antes en realidad se popularizo y mitifico como “bandera indígena”) y no así a las demás comunidades originarias de Bolivia, incluida la Guaraní y Tápiate que son las que viven aquí en el Departamento de Tarija, que oímos hablar todos los días inclusive por nuestro presidente de la grandeza de Simón Bolívar, no obstante lo irónico es que el destruyo una de sus obras más grandes o el monumento que se forjo en su honor “La República de Bolivia”, donde vemos al mismo sujeto hacer todos los días eco de su ignorancia (que todos sabemos que no es culpa suya sino de sus colaboradores que dejan que el señor haga papelones internacionales envés de ayudarle en su condición de “profesionales contratados” para asesorarlo) donde ser ministro, te da derecho a andar con pistola en mano y detener arbitrariamente al primer opositor que se te ocurra, simplemente porque te a ganado democráticamente las elecciones en una zona donde según voz la tenias controlada, donde Canal 7, que antes se llamaba Televisión Boliviana Nacional y que ahora ante el hibrido de país que tenemos, perdimos el concepto de nacional, teniendo inclusive un Congreso “Plurinacional” que se asemeja a la Asamblea de las Naciones Unidas ¿con representantes de cada nación dentro de Bolivia?, donde según ese criterio nuestra Nación ya no es Bolivia o mejor dicho ¿donde en Bolivia ya no existe la nación?, y donde las brechas que existían hasta la realización de la Asamblea Constituyente, son quebradas profundas o capas telúricas más grandes que la falla de San Andrés, donde hasta antes de la temporada de campaña para el referéndum revocatorio y para la aprobación de la “constitución política del estado”, decir autonomía para el Gobierno y sus “sectores sociales” (que casualmente tienen las mismas iníciales que la SS nazis”…) era realmente un pecado y ahora que ven que electoralmente les surte, es el emblema de batalla, donde tenemos un vicepresidente que estuvo preso por terrorismo, que ahora por su anarquismo y resentimiento acusa a todos de lo mismo por lo que el estuvo enjaulado (ya dice un dicho, el zorro y el ladrón, piensan que todos son de su misma condición…), donde los ministros si son polémicos, en las elecciones venideras sirven de diputados, donde los bloqueadores oficialistas “manifiestan sus derechos humanos” y el gobierno los respalda, mientras que a los “bloqueadores opositores” los hacen hervir con gas lacrimógeno y balas de gomas, por “atentar contra la estabilidad del estado”, donde la mezcla de todas las fobias y resentimientos habidos y por haber, se resumen en los ministerios de la presidencia y gobierno y sus máximas autoridades que a su vez son portavoces, autores intelectuales de represiones y ejecutores con pistola en mano, donde dicen que luchamos contra el colonialismo y envés de fiscales y jueces tenemos inquisidores (“Sin generalizar porque también existen otros administradores de justicia excelentes”…), donde las normas del derecho no valen y “eres culpable y reo hasta que se pruebe lo contrario”… donde nos dicen que tenemos que acordarnos de los tiempos de las dictaduras y andar con el testamento debajo el brazo, donde a uno le pagan desde el nacimiento con bonos prevendalistas para que se una al “sistema de cambio”, donde te entregan un bono escolar para comprar útiles una semana antes o después de la navidad en algunos casos bien aprovechado o en otros como medio para pagar la tomada de días de los padres, donde la Constitución Política del Estado es un libro más sin ton ni son, comparado con el libro que edita cualquier ministro de estado… donde según inteligencia del gobierno, misteriosamente todos los que no tienen carnet de inscripción en el MAS son susceptibles a ser el “tipo que quiere matar al presidente” y los verdaderos terroristas que los pillan infraganti con dinamita y explosivos, que hacen volar canales de televisión pero por ser seguridad del presidente de lo que quiera que ahora se llame Bolivia, salen libres….

Esta escrito, cada pueblo tiene lo que se merece, pero quisiera saber, que hicimos nosotros, el mas del 30% de los Bolivianos jóvenes que nunca nos involucramos en la vida política directa de esta nación para merecer esto, que hicimos nosotros los jóvenes, para que en los nuevos textos de educación tengan en vez de enseñar historia universal, solo la historia indígena aimara y quechua y ni siquiera la tomata, tápiate o guaraní, que es del lugar donde yo vivo, sino la que se le ocurra al ministro de educación para quedar bien con el presidente y su cultura.

No me interesa hacerle daño al que piense diferente, me interesa que no nos hagan daño a nosotros por pensar de esta manera, no quiero que Bolivia tenga zonas de guerra, no quiero vivir en uno, dos o tres Vietnams como algún presidente vecino dijo que instauraría si pasa algo con el actual gobierno, no quiero que mis hijos el día de mañana maldigan su hora de nacimiento por haberse convertido en un numero más bajo el dominio de la “dictadura del proletariado”, no quiero que las futuras generaciones tengan que contarse como historia o mito que en otros países existe tecnología avanzada en beneficio de las sociedades en general, que existe un buscador tipo google, una red social como el Facebook, que salir del país por más de un mes, tenga de castigo no poder volver más, o simplemente que en otros países existe ropa de diferentes colores, no quiero que cuando el día de mañana un Turista venga a Tarija se apene del descuido de la majestuosidad de la casa dorada o de muchos edificios coloniales importantes de donde vivo, así como pasa en la vieja habana…

En serio ya basta, por favor, despertemos, sino es bajo una ideología, hagámoslo bajo las garantías mínimas o derechos fundamentales de libertad, respeto, democracia, soberanía y racionalidad, démonos cuenta de una vez por todas que si no es ahora cuando pongamos un alto a todos estos atropellos, el día de mañana cuando queramos, vamos a estar viviendo bajo algo que no es nuestro, bajo una creencia donde Inti se coma a Dios (a pesar de supuestamente ser un estado laico) y donde el Derecho sea algo más utópico que llegar al paraíso, porque lamentablemente y no por culpa nuestra a esta generación de Bolivianos nos ha tocado vivir en el ojo de la tormenta…

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One comment for “Bolivia: El ojo de la tormenta – por Gonzalo Arellano Duran”

  1. […] BOLIVIA El ojo de la tormenta […]

    Posted by Fausta’s Blog » Blog Archive » The “Zelaya’s baaack” Carnival of Latin America and the Caribbean | September 22, 2009, 8:15 am

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