Mientras en la calle arreciaba la lluvia, en la bucólica sala de la sede de la Pastoral Universitaria, en el corazón de Barrio Norte, repiqueteaba ayer una palabra más que cualquier otra. Cambio.

“Es mucho más probable que el domingo de ballottage tengamos cambio en vez de continuidad”, dijo Carlos Fara (Carlos Fara & Asociados). Coincidieron Mariel Fornoni, de Management & Fit, y Pablo Knopoff, de Isonomía.

Convocados por el Consejo Profesional de Relaciones Públicas, la Asociación de directivos de comunicación (Dircom) e IDEA, los consultores admitieron que cuando faltan tres días para el ballottage los números favorecen a Mauricio Macri, del frente Cambiemos. Los escuchaban ejecutivos de las empresas Petrobras, Nobleza Piccardo, Roggio, YPF, Mondelez, Mercedes Benz, Telecom, Cagnoli, Pluspetrol y Techint, entre otros.

“Se ha dicho en las últimas horas que hubo un recorte [en la diferencia que Macri le lleva a Daniel Scioli, del Frente para la Victoria], pero no es lo que estamos viendo nosotros; la brecha hoy ronda los 10 puntos“, afirmó Fornoni. Y agregó: “Lo que todas las mediciones muestran es que la gente quiere un cambio”.

Según Knopoff, el elemento central del proceso electoral que culmina pasado mañana ha sido la “kirchnerización” de Scioli. “Lo que terminó sucediendo es que el oficialismo terminó llevando un candidato oficialista”.

Sus colegas coincidieron: Scioli representaba antes de las PASO la continuidad con un cambio de modos y estilo, pero terminó “kirchnerizado”, mientras que Macri se corrió hacia un cambio moderado con elementos de continuidad. Y esto favoreció a Macri.

El director de Isonomía dijo que no ve que la campaña negativa del oficialismo haya impactado en el votante, aunque advirtió que esto podría cambiar cuando el elector esté frente a las boletas en el cuarto oscuro. “Pero también hay miedo a la eternización del kirchnerismo y hay que ver cuál de los dos impera más”, expresó.

Opinó que el próximo presidente tendrá que ser muy claro en la comunicación para informar que habrá que hacer sacrificios. “Deberá mirar a los ojos a los argentinos y decirles que puede ser que haya unos malos primeros días para tener más adelante mejores días”. Y destacó que los dos elementos que “generan histeria” y condicionan el voto son el dólar y la inflación.

También sobrevolaron en la presentación algunos interrogantes sobre la gobernabilidad y la capacidad del próximo gobierno para construir acuerdos, tanto parlamentarios como con factores de poder, que le permita un tránsito sin turbulencias ante medidas antipáticas en el primer tiempo de mandato.

Una de las tareas, dijo Fara, será cómo afrontar la herencia y la convivencia con la futura ex presidenta. “¿Qué hacer con el libro de 12 años que deja escrito Cristina Kirchner?” es uno de los interrogantes. “Algunos dirán que hay que corregir algunas cosas, sacar una página, borrar algo…”, pero “gane quien gane habrá un perfil distinto de gobierno”.

Fuente: La Nación (Argentina)

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